Cómo hacer un buen currículum

Una de las partes más importantes de buscar empleo es la primera impresión que causamos cuando estamos buscando trabajo. Parte de esa primera imagen se basa en tu candidatura, es decir, en tu currículum. Vamos a ver algunos puntos importantes a tener en cuenta cuando redactamos nuestro CV de cara a una oferta de trabajo.

La fotografía del currículum

Es un aspecto muy sencillo, pero muchas veces las ganas de dar una buena imagen juegan una mala pasada. Tiene que ser una foto que te identifique en tu día a día, que tenga buena calidad y en la que salgas solo tú, no recortando a nuestros amigos de al lado. En cuanto al fondo, lo ideal es que no se vea demasiado y que no haya otras personas por detrás, si es al aire libre. Además, debe ser lo más actual posible.

Lo más sencillo es lo que mejor funciona: fondo neutro, buena iluminación y mostrarte tal y como eres.

Datos personales y de contacto

Debes identificarte desde el primer momento y, por eso, tu nombre no puede confundirse con una frase más dentro del CV. Tampoco significa que deba tener un tamaño que ocupe media página, si no, simplemente, que se vea a la primera claramente.

Lo siguiente se podría añadir en un apartado llamado «perfil profesional», pero lo importante es que aparezca tu profesión acompañada de una descripción breve o tres o cuatro palabras clave, por ejemplo, el sector o área de especialización para que te identifiquen rápidamente con el puesto que buscas.

Además, hay datos que sí deberías poner. La edad es un dato que tendría que aparecer para ser claros y sinceros. Se tiende a pensar que es malo ponerlo, pero no lo es, es una característica tuya más. Los datos de contacto también deben aparecer en tu currículum, si no, ¿cómo te contactarían si tu perfil les parece interesante? Por eso, el número de teléfono y el email tendrían que aparecer.

La formación: reglada y complementaria

En general, aunque la formación es igualmente importante, es más breve que la experiencia. Importante: en formación solo añadimos la formación reglada o estudios superiores, los cursos o formación complementaria irán en otro apartado.

Si tenemos un apartado de formaciones complementarias extenso, es mejor dejar solo aquellos cursos o formaciones relacionados directamente con la vacante. En casos de perfiles júnior con poca experiencia, sí pueden dejarse todas.

Por eso, es buena idea poner la formación en primer lugar para que se vea fácilmente y, a continuación, la experiencia.

Experiencia laboral

Pero, ¿cómo la presentamos? Una de las mejores opciones es poner tu puesto actual o el último trabajo en primer lugar e ir retrocediendo en el tiempo, pero siempre en orden cronológico; nunca unir experiencias por el tipo de puesto que has tenido porque solo hará que tu currículum sea confuso. Además, es bueno poner fechas (si el puesto ha sido durante menos de un año, deberías indicar cuántos meses fueron), puesto ocupado, empresa y funciones desarrolladas, por ejemplo:

2018-2022 Administrativa laboral

Empresa y actividad

Funciones:

• • Elaboración de nóminas
  • Altas, bajas y excedencias de los trabajadores
  • Apoyo en el área de contabilidad en el departamento contable

2015-2018 Administrativa en recepción

Empresa y actividad

Funciones:

• • Altas de nuevos usuarios
  • Elaboración de horarios de clases

Extensión del currículum: más no significa mejor

Se tiende a alargar el CV pensando que cuantas más páginas, mejor será tu currículum, pero no es así. La extensión ideal de un CV suelen ser un par de páginas, intentando resumir y ser lo más directos posible. Puedes añadir los cursos y demás títulos independientes que tengas, pero siempre intentando claro.

Es cierto que en algunos casos es necesario extenderlo un poco más, pero lo ideal es que sea un resumen de tu experiencia porque en la entrevista entrarás más en detalle.

Tu currículum es la introducción a la vida profesional, no la historia entera.

Revisar antes de mandar

Antes de darle a enviar, es recomendable repasar el documento por si se te hubiera quedado algo atrás. Por ejemplo, comprobar que da una buena impresión a primera vista, es decir, que no se haya descolocado nada al cambiar el formato o detalles que se te pueden haber pasado mientras lo redactabas.

Comprobar que tanto los datos de contacto como la ciudad o ubicación que has puesto son correctos. ¿Por qué? Porque si hay un error en el correo o el teléfono, no podrán dar contigo y, en cuanto a la ubicación, si quieres mudarte, debes ponerlo directamente. Si eres de Madrid y quieres mudarte a Valencia, en tu currículum tendría que aparecer como ubicación Valencia. De esa manera, dejarás claro en qué ciudad te quieres establecer.

Por último, comprobar las fechas de fin de trabajo o de estudios y asegurarte de que aparece tu puesto actual o el último que has desempeñado para que quede clara tu situación.

Nota importante: formato del currículum

Puede parecer algo trivial, pero el formato es importante. Intentar darle un formato a tu CV para que quede limpio y claro te ayudará a dar una buena impresión. También podrías utilizar columnas para ahorrar espacio, siempre y cuando no quede la información amontonada. Así, podrías poner formación y experiencia en la misma página.

Además, en algunos puestos, el CV actúa como carta de presentación. Por ejemplo, en las vacantes de diseño, un currículum con un formato creativo y llamativo te puede hacer ganar puntos.

El currículum no sirve para explicar al detalle tu trayectoria laboral, sino para hacer un breve resumen. Con él te presentas ante una empresa o una persona y le cuentas brevemente en qué puestos has estado anteriormente, ya tendrás tiempo de explicar en detalle cada experiencia en la entrevista.

Esperamos que este artículo te haya sido útil y te ayude a crear tu primer currículum, a mejorarlo de cara a nuevas oportunidades de trabajo o a añadir algunos apartados en los que no habías pensado antes. ¡Te esperamos en próximos artículos!