¿Qué es el clima laboral?

El clima laboral o clima organizacional es el ambiente que encontramos cuando llegamos a nuestro lugar de trabajo. En él influye desde el aspecto físico de la oficina hasta el tipo de jefe o supervisor que tengamos, si lo tenemos, pasando por los compañeros y el trabajo que desarrollamos.

Sin embargo, aunque parece que es algo incontrolable, no es cierto. Como líderes de la empresa debemos velar por un buen clima laboral y debemos detectar posibles problemas a tiempo. Por lo general, este tipo de problemas empiezan siendo cosas pequeñas a las que no les damos importancia y acaban creciendo exponencialmente como una bola de nieve.

Como hemos dicho, influye tanto el aspecto físico del lugar de trabajo como el trabajo en sí. Es decir, un lugar que esté descuidado, donde no se le haya dedicado ni un solo segundo a la planificación del espacio, puede ser un completo desastre.

Imaginemos un taller de madera. Si dentro del propio taller no hay cierta organización, nos volveríamos locos cada vez que tuviéramos que hacer cualquier cosa. Si, por el contrario, prestamos un poco de atención a la distribución del espacio y lo dividimos entre la zona de trabajo, la zona de herramientas, la zona de materia prima, etc. será mucho más sencillo ponernos manos a la obra y, además, mucho menos pesado. Obviamente, la organización depende siempre del tipo de empresa del que estemos hablando porque cada una tiene sus propias características.

En lo que respecta al trabajo en sí, es posible que se deba a una mala selección de personal. Si incorporamos a alguien que no esté motivado con el trabajo que va a desarrollar, puede ser no solo un problema para esa persona, sino también para todo el equipo y puede generar un mal clima laboral.

Por otro lado, están las relaciones interpersonales. Las relaciones que haya dentro del equipo y entre los líderes y los miembros del equipo marcarán el clima laboral para bien o para mal.

Cada persona es un mundo, eso está claro. Sin embargo, hay que saber conectar con los demás y tener en cuenta que todos somos diferentes. Aquí, el papel del líder es esencial. Hay que dar ejemplo, no se puede ser un líder controlador y que quiere que se acaten las órdenes sin rechistar y luego esperar que el clima laboral sea bueno.

Si como líderes damos ejemplo sobre cómo escuchar a los demás, dialogar, intentar encontrar el punto medio y razonar sobre las decisiones que se deban tomar, estaremos dando ejemplo sobre cómo ser justos unos con otros. Dando ejemplo estaremos poniendo la primera piedra para que el resto del equipo lo sea y haya un trato igualitario dentro del equipo, independientemente del rol que ejerza cada uno.

Pero sí que hay algo más. Como líderes, debemos de ser capaces de leer entre líneas y de anticiparnos a los posibles problemas. Es necesario prestar atención y detectar sí hay algún tipo de roce entre los miembros de nuestro equipo para atajar el problema de raíz y lo antes posible. Sin embargo, esto es muy complicado de ver desde dentro.

¿Cómo podemos analizar el clima laboral de la empresa?

Para poder detectar este tipo de situaciones que pueden derivar en problemas graves, un análisis de situación es una buena medida preventiva.

Gracias a ojos ajenos a la empresa, podremos ver situaciones o posibles conflictos que de otra forma sería imposible ver. En este link te damos más detalles sobre el proceso de un análisis de situación.

De esta forma, no solo conseguiremos saber si hay algún tipo de problema entre los miembros del equipo, sino también cómo perciben el trato que reciben de la empresa.

Un análisis de situación se basa en escuchar lo que tienen que decir tanto la empresa como el equipo de personas que la forma. Por lo tanto, aquí entrará en juego ya no solo el trato directo con cada una de las personas, sino con el equipo en su conjunto. Y, de hecho, las claves para que esta relación funcione al 100 % son la transparencia y la confianza.

Una empresa que confía en su equipo y es transparente con él es una empresa fuerte y capaz de evolucionar.

Durante un análisis de situación se entrevista al equipo de forma individual para que cada persona pueda dar su opinión sin estar cohibida por nadie. Gracias a esto, sabremos cuál es la visión real que tienen las personas de la empresa para la que trabajan y, al mismo tiempo, su motivación para estar en ella.

Sin embargo, en un análisis de situación no solo encontramos cosas buenas, también saldrán a la luz los pequeños problemas y esto es lo más interesante del análisis: sacamos a la luz pequeños problemas que no se han podido ver antes y los solucionamos antes de que vayan a más.

Mejorar el clima laboral

Una vez tengamos todas las cartas sobre la mesa, toca analizar estos problemas y adoptar medidas para atajarlos de raíz.

Cada problema es diferente y necesita una solución concreta, sin embargo, hablando en términos generales, algunas mejoras que se pueden adoptar son:

• Cuando sepamos cuál es la percepción que tiene nuestro equipo sobre la empresa, podemos implementar más medidas de salario emocional para mejorar esa percepción y responder a las propuestas que seguramente hagan.
• Sabremos qué carencias tenemos como líderes, por ejemplo, si nuestro equipo nos ve como alguien poco accesible, con alguien con quien no se atreven a hablar etc. Esto debe servir para cambiar nuestro tipo liderazgo, si es necesario, y mejorar la relación con nuestro equipo.
• Potenciar los puntos fuertes que detectemos y contar con la opinión del equipo para mejorar los puntos débiles.
• Crear una estrategia de employer branding o mejorar la que ya tenemos teniendo en cuenta los resultados del análisis.
• Adoptar medidas de autogestión que mejore tanto la productividad como la motivación de nuestro equipo.

Con estos pequeños cambios, junto a otros específicos para cada situación, mejoraremos en la gestión de personas y, por lo tanto, mejoraremos el clima laboral.

Si nos preocupamos de cuidar a las personas que trabajan con nosotros, ellos se preocuparán por cuidar de la empresa. Todo esto es un círculo que se retroalimenta. Si cuidamos a las personas, estarán más motivadas, mejorarán su productividad, mejorará el clima laboral, seremos una empresa que atraerá talento gracias a ese clima laboral y nuestra empresa prosperará.

Por lo tanto, el clima laboral es un factor clave dentro de nuestra estrategia de recursos humanos y un análisis de situación es una buena forma de saber si todo va bien dentro de la empresa y cuáles son los puntos clave para mejorar. Cuidando de las personas, cuidaremos de nuestra empresa y su futuro.